martes, 19 de enero de 2010

Responsabilidad social

Uno de los conceptos en los que me han introducido en el Máster en Dirección de Márketing es sobre la RSC y el márketing social. Dos conceptos diferentes pero que, en ciertos aspectos, la línea que los separa es muy fina.

Pero es que estos días, leyendo algunas noticias, me he vuelto a acordar de ellos dándome cuenta que, si una empresa tiene muy poca vista, la línea que separa estos dos conceptos del lado completamente opuesto también es demasiado fina y muy fácil de superar.

El caso más discutible es el de los bancos con las transferencias a Haití. Está claro que, tal y como he leído en algunos sitios, no están obligados a donar el dinero o dejar de cobrar una comisión por un trabajo que siguen haciendo. Pero el cobrar estas comisiones de transferencias controladas, les ha supuesto muchas críticas y ganarse una no buena imagen que ya no tienen.

Pero posiblemente los casos más claros son los de H&M y Mercadona. En el primer caso se ha descubierto que, la tienda H&M de Nueva York se dedicaba a tirar los excedentes a la basura, pero dejándolos inservibles antes de hacerlo. En el segundo caso, me acordé leyendo la noticia de H&M, que en mi casa todavía tengo media bola de queso que me dio un familiar que trabajaba en Mercadona, porque llegaron sin etiquetar y los iban a tirar.

Está claro que, en ambos casos, se tratan, por diversas razones, de productos inservibles para su venta. Pero un hecho tan simple como tirarlos a la basura puede generarles una muy mala imagen de empresas que no miran por la sociedad. En cambio un gesto tan sencillo como donar los alimentos o la ropa a gente necesitada o asociaciones no sólo estás ayudando a la sociedad, sino que repercute en tu imagen de empresa.

Seguro que fueron decisiones de trabajadores y no de la empresa pero, si no hay ciertas políticas de empresa bastante claras, al final, la imagen que da el trabajador es la imagen de la empresa.

viernes, 8 de enero de 2010

Gestión de proyectos - Gestión de personas

Hice en el 2008 un curso de Gestión de Proyectos en La Salle, la semana que viene comienzo otro en la empresa donde trabajo y he leído varios libros sobre la misma temática.

En todos los sitios hablan y te explican lo mismo: los cinco procesos básicos en cualquier gestión de proyectos (Inicio, Planificación, Ejecución, Control y Cierre) de lo importante que es mantener una buena documentación del proyecto, de la correcta y detallada definición inicial del proyecto, del control de las tareas y los timings, etc.

Pero por mis pocos años de experiencia gestionando proyectos he aprendido que, realmente, una de las cosas más importantes y que no suelen explicar es la gestión del equipo, de las personas que lo forman.

Si tienes un buen equipo, al que transmites confianza y con el que fluye la comunicación, el círculo de confianza se cierra del equipo al gestor y hace que todo funcione mucho mejor. Por mucho que sigas todos los procesos, que documentes bien, que planifiques mejor, si no hay confianza hacia y desde el equipo, nada funcionará.

Nunca debemos olvidar que el equipo lo forman personas. He trabajado en todo tipo de condiciones y, en los peores momentos, si esta confianza existe, si crees en el equipo, el equipo cree en tí y cree en el proyecto y se terminan consiguiendo cosas imposibles o casi imposibles.

miércoles, 9 de diciembre de 2009

miedo al cambio

Vivimos en un país cuya sociedad tiene una mentalidad funcionaria y cuya máxima es "más vale malo conocido que bueno por conocer", lo cual provoca que seamos una sociedad muy cómoda y con miedo al cambio. Pero la vida, de por sí, es un contínuo cambio. No paramos de cambiar físicamente, ni psicológicamente, cambiamos de amigos y cambia la propia sociedad. Pero aún así, tenemos miedo al cambio.

A pesar de no estar a gusto profesionalmente o querer progresar en nuestra carrera, nos da miedo cambiar, porque ya conocemos lo que tenemos y no sabemos lo que nos deparará el futuro. A pesar de poder estar pasando una mala racha personal, nos da miedo cambiar. Tenemos miedo a lo desconocido y a lo que nos pueda deparar el futuro. He vivido de forma directa y de forma indirecta lo que puede provocar el no querer cambiar por miedo.

Preferimos los problemas que nos pueden acarrear el aceptar lo malo conocido que las soluciones que nos puede adoptar lo bueno por conocer. Pero tenemos que ser más valientes y aceptar que, cuando el presente no es como nos gusta o como nos esperábamos, hay que cambiar, hay que dar un paso al frente y aceptar que nuestro entorno y nuestra vida cambia y tenemos que cambiar con ellos. Cambiar de trabajo, de profesión o, incluso, de personalidad o de seres queridos. Aunque es muy difícil ponerlo en práctica, como digo yo siempre: Mejor arrepentirse por haberlo hecho, que por no haber hecho nada.

jueves, 5 de noviembre de 2009

2001: Entrando de lleno al mundo del ocio

En el 2001, y después de mi paso por el mundo de Internet, entró en mi vida profesional el sector del ocio, al cual sigo ligado todavía a día de hoy.

En dicho año, pasé a formar parte de la plantilla de Cirsa (concretamente en la subdivisión de la ya extinguida Cirsa Interactive) y a la cual estuve ligado durante 2 años, hasta el 2003. En ese tiempo formé parte de un equipo de trabajo cuyo objetivo era el desarrollo de un casino on-line, desarrollado 100% en Java (Applet + J2EE). Mis inicios en dicho equipo fue como Analista/Programador, para posteriormente encargarme de la Gestión del frontend de la aplicación (los juegos del casino) y ,finalmente, realizar tareas de Jefe Sección como sustitución temporal. Aunque los resultados no fueron tan fructíferos como hubiese deseado, si que fue una época en la que aprendí mucho, crecí más y, sobretodo, conocí a grandes personas.

Desde el 2003, y hasta la fecha actual, trabajo para Gigames, empresa encargada en la fabricación de máquinas recreativas para bares. Formando parte de la sección de Software del departamento de I+D y encargándome de la gestión del desarrollo de la plataforma software que gestiona la máquina.

jueves, 15 de octubre de 2009

pequeños cambios, grandes cambios

El otro día, en el blog Atrapando Sueños (que sigo diariamente mediante mis subscripción RSS) leí un cuento llamado EL RECOLECTOR DE ESTRELLAS, que me gustó mucho, ya que su moraleja es muy interesante y que da mucho que pensar.

La gente solemos movernos por grandes acciones o por el cortoplacismo. Sólo si vemos que nuestra acción tiene una efecto tangible, importante y visible, nos movemos. Por el contrario, si nuestra acción es tan pequeña que no vemos su beneficio a corto plazo, no le vemos el sentido de molestarnos en realizarla.

No somos conscientes que, por ejemplo, ayudar a una persona necesitada no puede tener efectos a corto plazo, pero sí efectos muy importantes a largo plazo. Ya que una persona no hace nada, pero una persona de vez en cuando, a la larga son muchas personas. Pero si la gente de al lado nuestro toma ejemplo de nosotros, ya no es una persona, son más personas. Es lo que se ha llamado el Efecto Mariposa.

Hace tiempo conocí una persona que contaba que, una vez, estando muy necesitado de un transporte, se puso a hacer auto-stop hasta que alguien le recogió. Se sintió tan agradecido en ese momento que decidió que cogería a todo el mundo que pudiese que estaba haciendo auto-stop.

Si este ejemplo lo extrapolamos a cualquier acción, seguro que ayudaríamos a tener un mundo mejor.

Así que deberíamos comenzar a convencernos todos que pequeños cambios, grandes cambios.

miércoles, 30 de septiembre de 2009

Gestión de las expectativas

Uno de los aspectos a tener en cuenta en marketing, a la hora de comercializar un producto o servicio, son las expectativas generadas en torno a éste. En función a la imagen que generemos, el posicionamiento que apliquemos y a la comunicación que hagamos, el cliente se irá creando unas expectativas sobre el producto. Pero si estas expectativas no las sabemos gestionar bien, se pueden volver en nuestra contra. Unas altas expectativas mal cubiertas, crea un cliente insatisfecho y, también, un número elevado de potenciales clientes perdidos. En cambio unas expectativas bien cubiertas, creará un cliente satisfecho y, en definitiva, un cliente más y un número alto de potenciales clientes.

Un ejemplo de una mala gestión de las expectativas es el Institut Internacional de Postgrau de la UOC. El IIP se basa en sus 10 años de experiencia y en la imagen de seriedad y solvencia que genera la UOC como institución, para ofrecerse como una alternativa solvente y sólida de escuela de negocio. Una metodología de aprendizaje innovadora y puntera basada en un material y contenido actualizados y un profesorado de nivel y compuesto por profesionales en activo. Todo esto es lo que te hace generarte unas expectativas como estudiante bastante altas.

El problema se genera cuando comienzan los problemas técnicos con el campus, el envío de material erróneo y/o no actualizado (en el caso de que te envíen el material) y, lo que es peor, la desatención por parte del profesorado, tutores y el servicio de atención al estudiante o secretaría. La sensación de impotencia que genera el ver el mal servicio ofrecido y la posteriror desatención por parte de los que deberían solucionarte los problemas, provoca que termines siendo un cliente insatisfecho.

Si no sabes, no eres capaz o no tienes los recursos para dar un buen servicio, lo que no puedes es generar unas expectativas hacia el estudiante (cliente) de que eres una institución innovadora, solvente y seria. Porque al final, cuando se entra en contacto directo con el servicio es cuando esas expectativas generadas se vuelven en tu contra.

martes, 22 de septiembre de 2009

La satisfacción de ver el fruto de tu trabajo


Que bien sienta ver que el fruto de tu trabajo tiene resultados satisfactorios y existosos. Que la duras horas de trabajar, planificando, gestionando, controlando y programando al final tienen sus resultados recompensados con creces.


Después de 6 años en una empresa joven (sólo tiene 7 años), de mucho trabajo realizando un producto empezado desde 0 y de entrar en un sector tan complicado como es el del juego y con unas barreras de entrada tan importantes (teniendo en cuenta que tenemos como competencia a monstruos como Cirsa y R. Franco) podemos sentirnos satisfechos de nuestro trabajo realizado.


No sólo tenemos una máquina que está funcionando bien (http://www.gigavegas.es), sino que además hemos sido el primer fabricante español en introducir una máquina en la comunidad de Madrid, adaptándonos al nuevo reglamento en un tiempo récord.





Enhorabuena a mi equipo de trabajo y todos mis compañeros que han hecho posible alcanzar este hito tan importante.

lunes, 14 de septiembre de 2009

N1H1

Pocas veces dos letras y un número habían dado tanto que hablar. Llevamos muchos meses oyendo hablar de este famoso virus, pero a medida que se acerca el invierno en el Hemisferio Norte cada vez oímos hablar más.

Desconozco si este virus de la gripe es peor que la estacional, si es más peligroso, si tiene más riesgo de contagio o, si por el contrario, no hay grandes diferencias entre uno y otro. La sociedad hemos estado tan desinformados, como alertados. Se ha generado un pánico social que creo que está fuera de lugar.

Hay todo tipo de teorías de conspiraciones y de objetivos secretos de las farmacéuticas. No sé si hay algo de esto o es un simple virus que se ha generado fuera de control. Lo único que tengo claro es que un virus de la gripe ha hecho que nos olvidemos de los parados, de los ERE, de las empresas que cierran o de los bancos y cajas que se tienen que fusionar por problemas de solvencia. Nadie se acuerda de la guerra de Afganistán, del conflicto Israel-Palestina o de las elecciones de Irán. Nos hemos terminado de olvidar (si en algún momento lo hemos tenido presente) la gente que hay en el mundo pasando hambre o sufriendo dictaduras.

¿Tan importante es este virus de la gripe?

jueves, 3 de septiembre de 2009

De vuelta a la realidad

Pues ya hemos agotado las vacaciones de este 2009 y volvemos a estar de vuelta con la realidad laboral. 11 meses esperando con ganas y planificando las vacaciones, para luego ver que se pasan sin darse uno cuenta.

Atrás queda el viaje por Marruecos, donde hemos podido conecer muy buena gente y tener experiencas que seguro que nunca olvidaremos. El desorden ordenado de Marrakech, la inmensidad y el calor del desierto, las horas y horas de coche compartidas con nuestro gran chofer y mejor persona Ahmed, poder comprobar que los marroquís, en su hábitat natural, son muy buena gente y muy amables, etc...

Ahora toca disfrutar durante 11 meses del trabajo que nos permite, posteriormente, disfrutar de las tan merecidas vacaciones.

miércoles, 8 de julio de 2009

1999: y descubrí internet

En el año 1999 fue el año en el que descubrí internet (desde el punto de vista profesional) cuando comencé a trabajar en IHG, una consultoría de Internet dedicada a hacer, principalmente, proyectos llave en mano.

En esta empresa crecí como profesional participando en multitud de clientes (eDreams, UOC, Soler & Palau,...) para multitud de proyectos (B2B, Catálogos on-line, gestión bases de datos,...)

Comencé en el 1999 como becario y finalicé mi andadura profesional en el 2001 con ciertas responsabilidades técnicas. Durante todo este tiempo tuve la oportunidad de trabajar con diferentes tecnologías y herramientas (principalmente Java y XML) y, sobre todo, con multitud de compañeros de los que pude aprender muchas cosas.